Las autoridades de Guatemala concluyeron este viernes el traslado a uno de los albergues temporales de los sobrevivientes de la erupción del volcán de Fuego, que el pasado 3 de junio arrasó una comunidad que dejó 425 muertos y desaparecidos.

En total fueron reubicadas 144 familias integradas por 583 personas, cuyo traslado inició el lunes pasado con 24 familias y terminó este viernes, dijo a la AFP el vocero de la Coordinadora para la Reducción de Desastres (Conred), David de León.

Las personas estaban ubicadas en albergues colectivos como escuelas o salones comunitarios, que ahora volverán a retomar sus funciones originales, aseveró.

No obstante, falta terminar con el traslado de un último bloque de damnificados a la otra finca estatal que albergará temporalmente a sobrevivientes, que comenzó el pasado 31 de junio.

Los denominados Albergues de Transición Unifamiliares (ATU) están construidos de madera en fincas de Escuintla (sur) y en San Juan Alotenango, al suroeste de la capital y cuyo proceso terminó este viernes.

Los ATU cuentan con servicios básicos como energía eléctrica y agua potable, así como un centro de estudios, una clínica médica, comedor, cocina y una estación de la Policía Nacional Civil (PNC) con 20 agentes.

Tras la erupción, más de 3.000 personas de la devastada aldea San Miguel Los Lotes y otros poblados vecinos fueron resguardadas en 16 albergues.

La furia del coloso de 3.763 metros de altura y ubicado 35 km al suroeste de la capital dejó 165 muertos y 260 desaparecidos.

El gobierno tiene previsto construir en año y medio viviendas permanentes en la finca La Industria, en Escuintla, aunque el proyecto se atrasó debido a advertencias de la Contraloría de Cuentas sobre posibles anomalías en la adjudicación millonaria del contrato a una empresa privada.